Mirando el horizonte
Hoy con vuestro permiso, voy a sacar mi alma poeta en esta entrada. Son unos versos con bastante sentimiento que tenía ganas de escribir y en una primaveral noche de insomnio como hoy, he encontrado lugar y momento donde plasmarlos. Sin duda alguna, las oscuras paredes de la habitación de Kiros son su perfecto recipiente.
Lejos, lejos hay una prisión
lejos aunque no se puede indicar con precisión
custodiada por altas y gruesas murallas
en ella es imposible hacer incisión
Rodeada por un mar de estrellas
ocupa los sueños sobre aquella doncella
Mal se piensa que es una adquisición
pero no es más que un préstamo sin comisión
Fuente de emotividad
bello regalo y dura punición
delicada posición para acentuada realidad
delicada posición para tal incomodidad
Es en esta desconocida prisión
lejos de cualquier tipo de razón
donde se encuentra el corazón.
Kiros
0 comentarios:
Publicar un comentario